Hoy venimos con un problema muy frecuente entre nuestras clientas, pero que suele ser un poco tabú a la hora de comentarlo o explicarlo. A menudo las mujeres sufren molestias en la zona íntima, picor, dolor, escozor, mal olor,…y no saben cómo saber si se trata de una infección o no y cómo tratarlo. Normalmente se asocia con los hongos, pero ¿se trata siempre de hongos vaginales? ¿o no estamos tratando bien el problema? Hoy lo explicamos todo.
Hay 2 tipos de infecciones que son las más comunes:
1.- Infección por hongos o candidiasis. Son infecciones causadas por cualquier tipo de Cándida. La Cándida es un hongo que tenemos normalmente en la flora vaginal, pero a veces prolifera y aumenta su concentración, dando lugar a la llamada candidiasis. No es una enfermedad de transmisión sexual, pero en caso de mantener contacto sexual si que se contagia.
2.- Infección por bacterias o vaginosis bacteriana. En la flora vaginal normal hay un microorganismo llamado Lactobacillus acidophilus, que evita que otros microorganismos crezcan más de la cuenta. Cuando por alguna razón, este Lactobacillus baja su concentración (por algún factor que haga cambiar el pH de la vagina y volverla menos ácida, como pueden ser los antibióticos, las relaciones sexuales, o la menstruación), el resto de microorganismos aumenta produciendo síntomas de vaginosis bacteriana.
¿Cómo saber si lo que se tiene es una infección por hongos o por bacterias?
- En una candidiasis (hongos), los síntomas en la zona íntima suelen ser: picor, escozor, aumento del flujo vaginal, dolor y enrojecimiento de la zona vulvar y dolor al orinar.
- En una vaginosis bacteriana, el principal síntoma es olor desagradable (como un olor muy fuerte a pescado), pero también puede notarse un flujo blanquecino. Estos síntomas además, empeoran con la menstruación y tras las relaciones sexuales.
Si aún conociendo estos síntomas no tienes claro qué tipo de problema tienes, existe un test que te ayudará a averiguarlo. Diferencia con una muestra de flujo si se trata de una infección por hongos o por bacterias. Pregúntanos y te daremos toda la información sobre él.
¿Cómo tratar cada infección?
- Una candidiasis se trata con un antifúngico, en forma de crema vaginal o comprimido vaginal.
- Una vaginosis bacteriana se trata aplicando un gel que contenga ácido láctico para que se restaure el pH de la vagina, y que haga que el Lactobacillus vuelva a su concentración normal.
Por lo tanto, no siempre que notemos molestias en la zona íntima se tratará de hongos, debemos identificar los síntomas concretos y con ello averiguar de que se trata, de esta forma lo trataremos de forma adecuada y el problema se resolverá. Ante cualquier duda, o si estos problemas ocurren de manera frecuente, recomendamos que acudir al médico o al farmacéutico.