Mis cuñados han estado de crucero la última semana, y venían abatidos, ya que el último día uno de sus hijos sufrió un percance, y le tuvieron que dar 3 puntos en una brecha, con el consecuente coste de 600 €.
En España tenemos una Sanidad Gratuita ( la pagamos con nuestros impuestos ), y Universal. Lo cuál es algo que debemos agradecer, pero también tener muy en cuenta; y sobre todo cuando viajamos.
Por ello, hoy os traemos en este Blog Saludable, unos consejos para viajar seguros y evitar gastos mayores de lo que ya supone, sufrir algún incidente o ponerse malo.
Dependiendo de a dónde se viaje y con quién habrá que añadir más o menos productos, pero los indispensables son:
- Analgésicos: en este caos el Paracetamol es el Rey, ya que es muy eficaz y seguro para cualquier tipo de dolor. Además hay variedad de dosis y presentaciones para cada tipo de persona y sus gustos.
- Antiinflamatorio: aquí podremos elegir entre los que son de indicación farmacéutica, el ibuprofeno, naproxeno y desketoprofeno. Sobre todo por si sufrimos algún golpe o torcedura. Importante seguir varios consejos cuando se utilizan antinflamatorios del grupo de los AINEs. Tomarlos siempre con alimento sólido en el estómago para evitar las lesiones gástricas. Aplicar protección solar durante su uso, ya que los AINEs son Fotosensibilizantes, hacen que la piel esté más sensible al sol, y con ello pueda aparecer una quemadura solar antes de lo esperado; o incluso reacciones anómalas.
- Crema antiinflamatoria, si eres propenso a las lesiones musculoesqueléticas.
- Antihistamínico; por si sufriéramos una reacción a una picadura, alimento o planta; sea reacción respiratoria o cutánea. Tomaríamos el antihistamínico y si es una reacción exagerada, acudir lo antes posible a un centro médico. También se deben tomar precauciones con el sol, y si se va a manejar maquinaria, ya que pueden producir somnolencia.
- Si vas a viajar en avión o bucear, añadimos un spray descongestivo, para despejar la vía aérea superior, y que así se pueda realizar correctamente la descompresión. En el caso del viaje en avión, lo ideal es según nos sentamos en el asiento, sonarnos la nariz, y acto seguido pulverizar el spray en los 2 orificios nasales. Y cuando el piloto comunique que se empieza el descenso, repetir esta misma operación.
- Probióticos. Tanto para evitar diarreas, como estreñimiento, los probióticos son nuestros aliados en los viajes. Al cambiar los ritmos, las comidas y las bebidas, nuestra flora intestinal sufre, y por ello una ayudita extra no le viene nada mal.
- Suero de rehidratación; por si la temida diarrea del viajero hace acto de presencia. No recomendamos llevar “corta diarreas”, ya que este aumento de las heces es una reacción de defensa del organismo para expulsar el agente dañino; sea químico o biológico; por lo que si cortamos esta expulsión, lo vamos a dejar en contacto con nuestro organismo más tiempo, y puede ser perjudicial.
- Suero fisiológico en monodosis. Nos servirá para limpiar los ojos si se nos mete algo dentro o si aparece una conjuntivitis. Para limpiar la nariz si nos resfriamos o tenemos rinitis alérgica. Y por último, para limpiar heridas, ampollas y quemaduras.
- apósitos, para cubrir lesiones, o incluso las temidas ampollas en los pies.
- Tiritas o Compeed ; para esos pequeños accidentes, cortes, raspones y ampollas.
- Repelente de insectos. Por 2 razones, para evitar las molestas consecuencias del picor tras picadura; y sobre todo para evitar las infecciones que nos pueden trasmitir los insectos, arácnidos y artrópodos.
- Crema antihistamínica o con hidrocortisona; para calmar esa piel irritada por picadura, o algún eccema de contacto.
Esto sería lo básico, pero dependiendo del destino, a lo mejor debemos hablar con el médico y que nos recete algún medicamento que crea conveniente.
Y por supuesto, llevarnos los medicamentos que usemos habitualmente, junto a un informe u hoja de medicación, para que si nos tienen que atender en el extranjero, sepan las terapias que seguimos.
Por último, no debemos olvidarnos de cumplir con las vacunas que nos aconsejen desde vacunación exterior, según nuestro destino; son una inversión en salud, y un pequeño coste comparado con lo que cuesta el viaje y con los posibles costes sanitarios fuera de España, además del coste emocional y físico de estar enfermo fuera de casa.
Viaja con precaución, y sobre todo Disfruta del Viaje.