Dormir es uno de los placeres de la vida, y fundamental para el descanso tanto del cuerpo, como para que la mente retenga y ordene todo lo pasado durante el día. Cuando el cuerpo y mente están descansados, el día se enfrenta de forma diferente, incluso de mejor humor.
Hay que prestar especial cuidado al ambiente que tenemos en la habitación en la que vamos a dormir, no debe ser ni muy frío ni muy caliente; ya sé que ahora en verano es algo complicado, lo que podemos hacer es darnos una ducha fresca antes de irnos a dormir para bajar un poco la temperatura corporal y así poder conciliar el sueño. Evitar ruidos excesivos, y si los hubiere, utilizar tapones anti-ruidos. Suelen ser recomendables los de goma espuma, que al aplastarlos e introducirlos en el conducto auditivo, se expanderán y taponarán las ondas sonoras.
Consejos básicos:
- Establezca un horario regular de acostarse y levantarse. Los ciclos de sueño suelen duran 90 min. sabiendo la hora a la que has de levantarte, calcula a qué hora debes acostarte para poder despertar en el intercambio de ciclo.
- Las siestas no deben durar más de 45 minutos.
- Evite tomar alcohol y fumar 4 horas antes de irte a dormir.
- Evite tomar cafeína a partir de las 15.00, sobre todo si eres muy sensible.
- No cenes cosas picantes, o cenas muy copiosas
- Evita el azúcar antes de acostarte, ya que puede actuar como estimulante
- El ejercicio ayuda a cansar el cuerpo, pero no debe hacerse antes de acostarse.
- Elegir una cama cómoda
- Reserve la habitación sólo para dormir y otras tareas placenteras.
Y lo más importante de todo, adoptar una postura saludable al dormir, para así mantener un sueño continuo y reparador; es lo que se conoce como ergonomía del sueño.
Según avanzan los años, toma mayor importancia las posturas en las que duermes, ya que puede provocar dolores crónicos durante el día.
¿Quién no se ha dormido en el sofá? , y luego cuando te levantas, pareces Robocop, doliéndote la espalda o el cuello, o incluso todo el cuerpo.
Es tan importante la postura como la superficie elegida para dormir.
La almohada es fundamental si vamos a dormir boca arriba, para mantener la columna recta y alineada con la cabeza. Ni muy baja ni muy alta, y quizás mejor dura que blanda.
Una buena opción si dormimos de lado, es utilizar un cojín bajo las rodillas, para corregir la curvatura lumbar y mantener la línea recta en toda la columna.
Los que roncan y tienen apnea del sueño, no deben dormir boca arriba, ya que esta postura dificulta la capacidad respiratoria.
Dormir boca abajo no es una buena opción; ya que la columna vertebral no descansa quedando suspendida en el aire y tensa.
Para mejorar la calidad del sueño, tanto ayudando a la conciliación ( empezar a dormir), como para evitar los despertares nocturnos; podemos incorporar a nuestra rutina, diferentes complementos alimenticios, que serán diferentes según las necesidades de cada paciente.
Por ello es importante que consultes al farmacéutico, para que realizando varias preguntas ya protocolizadas, pueda realizar la mejor indicación posible.
No todo lo que le va bien a “tu vecina”, tiene porqué irte bien a ti.