Cada vez que comienzo una entrada al Blog, me doy cuenta de que el tiempo pasa, y con ello acumulas experiencia, personal y profesional. Desde pequeña he convivido con muchos animales mamíferos ya que mi padre era veterinario especialista en Porcino, y en las granjas que visitábamos no sólo había cerdos. Solían tener gatos para evitar las plagas de roedores que acuden a comerse los piensos de los cerdos, y perros como vigilantes de las instalaciones. Y al estar en fincas grandes, con vegetación, e incluso cultivos, raro era el día que no te llevabas una garrapata puesta. Recuerdo que una vez fue realmente traumática para mí, pues tendría 4 o 5 años, y cuando mi madre me lavaba el pelo, yo le decía que me dolía una zona de la cabeza como si tuviera un chichón. Mi madre miraba y no veía nada. Hasta que tras un par de semanas yo me seguí quejando, y ya mirando más detenidamente, descubrió UNA GARRAPATA en mi coronilla. La verdad es que nos pusimos a gritar las 2 y ella tampoco tenía la información que os voy a contar ahora, y la arrancó de cuajo. Eso me ha provocado una cicatriz en el cuero cabelludo, y el riesgo de dejar el órgano succionador dentro de mi piel y que pudiera provocar una infección.

Lo primero vamos a conocer a las garrapatas. Son parásitos que se alimentan de la sangre de mamíferos, aves y reptiles, y pueden transmitir diversas enfermedades tanto a humanos como a animales. A continuación, te detallo la información más relevante y actual sobre las garrapatas:

Qué Hacer Si Encuentras una Garrapata

1.Remoción Segura: Usa pinzas finas previamente desinfectadas con alcohol para agarrar la garrapata lo más cerca posible de la piel y tira suavemente hacia arriba con una presión constante, no tires de golpe como hizo mi madre. No retuerzas ni aplastes la garrapata.

2.Limpieza: Limpia el área de la picadura con alcohol, y lávate las manos con agua y jabón.

3. Vigilancia: Observa el área de la picadura y tu estado de salud durante las semanas siguientes. Consulta a un médico si notas erupciones, fiebre, o síntomas inusuales.

¿Cómo podemos prevenir que una garrapata se venga con nosotros?

*Ropa Apropiada: Usa ropa de colores claros para detectar más fácilmente a las garrapatas, y ropa que cubra la piel (mangas largas, pantalones largos metidos en los calcetines)

*Repelentes de Insectos: Utiliza repelentes que contengan DEET, picaridina o IR3535 en la piel y permetrina en la ropa. En la farmacia disponemos de una amplia variedad de repelentes, y con concentraciones diferentes según la protección que busquemos o el lugar al que vayamos.

*Revisiones: Realiza una inspección completa del cuerpo después de estar en áreas con vegetación densa, prestando especial atención a las axilas, detrás de las rodillas, en el cuero cabelludo, y otras áreas donde las garrapatas pueden esconderse, como son las zonas íntimas.

*Dúchate: La ducha dentro de las dos horas posteriores de estar en zonas de riesgo puede ayudar a eliminar las garrapatas no adheridas

¿Debemos evitar salir al campo?

Podemos y debemos salir al campo, ya que es bueno para sintetizar vitamina D, hacer ejercicio, y es un buen antidepresivo. Pero debemos seguir unos pequeños consejos

a)Evita Zonas de Alta Vegetación: Sigue los senderos y evita caminar por hierba alta o matorrales

b)Ropa y Equipamiento, ya lo hemos comentado anteriormente. Recuerda revisar cuidadosamente tu equipo y mascota antes de entrar a casa.

Cada vez hay más mascotas tanto en pueblos como en ciudades, sobre todo perros, por ello es muy importante el uso de productos antiparasitarios, que por contener biocidas están considerados medicamentos y llevan un control exhaustivo para evitar futuras resistencias.

Los debe recetar el veterinario, y dispensarse en la farmacia por ser el único establecimiento autorizado a su dispensación. El farmacéutico es el experto en el Medicamento, sea de uso humano o veterinario.

Inspecciona a tu mascota regularmente, especialmente después de haber estado en el exterior. Presta especial atención a las orejas, cuello, entre los dedos, y alrededor de la cola. Baña y cepilla a tu mascota regularmente, utilizando productos antiparasitarios si es necesario. Mantén el área donde juega y descansa tu mascota libre de garrapatas, cortando el césped regularmente y eliminando hojas y escombros. Especial atención a su cama.

Cuando hablamos de “Bichos” que pican, mucha gente no es consciente del riesgo que ello conlleva. Porque la picadura en sí puede ser molesta, pero LO PEOR, es que cuando nos pican nos pueden “Meter” cosas, es decir agentes externos que nos pueden causar ENFERMEDADES, que en muchos casos son graves. En el caso de las garrapatas las más frecuentes son:

Enfermedad de Lyme: Causada por la bacteria Borrelia burgdorferi, es la infección más común transmitida por garrapatas en Norteamérica y Europa. Se habló mucho cuando la Selección Española se concentró en la Selva Negra. ¿Se hablará de nuevo en esta Eurocopa?

Fiebre Maculosa de las Montañas Rocosas: Provocada por la bacteria Rickettsia rickettsii, puede ser grave si no se trata. Cuidado con los chavales que se van de intercambio

Anaplasmosis: Enfermedad bacteriana causada por Anaplasma phagocytophilum.

Babesiosis: Provocada por parásitos del género Babesia, afecta principalmente a los glóbulos rojos.

Tularemia: Causada por la bacteria Francisella tularensis.

Encefalitis por garrapata: Un virus que puede causar inflamación del cerebro.

En conclusión. El mejor escudo es una buena PREVENCIÓN.

– La prevalencia de garrapatas puede estar aumentando debido al cambio climático, ya que temperaturas más cálidas pueden extender su hábitat.

– Se están desarrollando nuevas vacunas y tratamientos tanto para humanos como para animales para combatir las enfermedades transmitidas por garrapatas.

Tomar estas precauciones puede ayudarte a reducir el riesgo de picaduras de garrapatas y las enfermedades asociadas.

Espero que estos consejos te ayuden a prevenir el desagradable encuentro con este bicho al que tengo especial “odio”.