“Gloria” acaba de pasar por nuestro país y ha dejado viento, lluvia, nieve, olas y frío, mucho frío. Seguro que además de todo esto, ha dejado alguna que otra bronquiolitis en los más pequeños de la casa.
¿Por qué ahora todo el mundo habla de bronquiolitis? Antes parece que no había tanta…
La realidad es que antes existía, pero con otros nombres. Hoy en día es muy común conocer a alguien con hijos con bronquiolitis.
¿En qué consiste la bronquiolitis?
Los niños pequeños tienen unos bronquios muy pequeños, que se llaman bronquiolos y que aún están muy inmaduros. Estos bronquiolos, cuando son invadidos por virus generalmente, se inflaman, se obstruyen y aumenta la producción de mucosidad. Estos 3 factores hacen que el niño tenga mucha dificultad para respirar. Dependiendo de cuánta obstrucción haya en los bronquios, la bronquiolitis será más grave o menos grave, y el niño tendrá que hacer más sobreesfuerzo o menos para poder respirar.
¿Cómo saber si nuestro hijo tiene bronquiolitis?
Como hemos comentado, la bronquiolitis causa una dificultad para respirar, por lo que notaremos que el niño respira mucho más rápido para poder coger más aire e incluso mueve el abdomen de tal forma que incluso se le hundan las costillas. Suele aparecer después de 3 o 4 días de catarro, en los que en lugar de ir a mejor, el cuadro empeora.
¿Qué medicamentos hay para tratar la bronquiolitis?
No muchos… hay dudas sobre la eficacia y los beneficios de tratar la bronquiolitis con medicamentos. Se recomiendan instilaciones de suero fisiológico en las fosas nasales y aspirar la mucosidad en caso de que sea abundante. No obstante, puede que el pediatra recete broncodilatadores los meses de invierno o corticoides inhalados, que mejoran la capacidad del niño para respirar en el momento y a largo plazo.
Normalmente el niño tendrá menos hambre, así que le tendremos que ofrecer la comida en menos cantidad y con más frecuencia. Como nos pasa a los adultos, comer cuando tienes mucha mucosidad y dificultad para respirar no es que apetezca mucho.
Consejos para que la bronquiolitis pase cuanto antes.
- Mantener la habitación y la casa en general bastante húmeda. En Madrid estamos muy escasos de humedad, así que necesitaremos utilizar humidificadores.
- Si al niño le cuesta dormir totalmente horizontal, incorporarle un poco.
- Utilizar mucho suero fisiológico en las fosas nasales y aspiradores como Narhinel (Rhinomer).
Cuando preocuparse por una bronquiolitis.
- Cuando aparezca fiebre alta.
- Cuando tengan los labios azulados o morados.
- Cuando el rechazo a la alimentación sea muy claro y evidente, de tal forma que coma menos de la mitad de lo que come habitualmente.
- Cuando estemos hablando de niños prematuros o con alguna patología previa.
- Cuando el niño tenga menos de 3 meses, en bebés tan pequeños hay que preocuparse casi por todo.
Cualquier duda que tengáis sobre la bronquiolitis o problemas respiratorios de los más pequeños de la casa, estaremos encantadas de ayudaros en lo que podamos desde la farmacia.