El otro día tuve una comida familiar, y mi suegra contó cómo las puertas del ascensor se cerraron mientras entraba con el carro de la compra, y le dieron un golpe en los brazos; esto provocó que le aparecieran sendos moratones en los antebrazos, y como tiene la piel muy fina y además toma anticoagulante, uno de ellos se desgarró y no dejaba de sangrar. Me preguntó qué podía haber

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